

Aunque blogueros, medios y la gente en general realiza la cobertura de eventos como el Miami Fashion Week, sigue quedando un tremendo vacío de información que no está siendo documentada. (Fotos: @anacrisen)
El mundo de la información ha cambiado, y en mi reciente cobertura de la Miami Fashion Week, pude constatar una vez más que los viejos tiempos del periodismo han quedado ya muy atrás, al menos en Estados Unidos.
Y como no quiero gastar mis tan preciados caracteres, aquí les va en bullet points y negritas las conclusiones a las que llegué.
- Los medios ya no están cubriendo en vivo mucha de la información valiosa: En este evento que tuvo un nivel altísimo se vivían varias realidades paralelas. Por un lado los medios locales que acudieron (principalmente televisión) cubrieron a las estrellas y celebridades locales, mientras otros pocos se enfocaron sólo en unos cuantos desfiles e hicieron algunas entrevistas. Fue poca la cobertura de periodistas profesionales especializados en moda la que se logró en el evento. Conclusión: Los medios ya no tienen los mismos recursos para cubrir historias.
- Demasiada información para las blogueras de moda: En lo personal, me encanta la labor que hacen los blogueros, pero para que logren una cobertura del nivel que esperamos de la prensa resulta demasiado exhaustivo y casi imposible para una sola persona, y en realidad ellos no tienen por qué hacerla. En este caso las blogueras crearon su contenido desde su muy personal punto de vista y con las herramientas que tuvieron al alcance, tendiendo a ser ellas las protagonistas. Conclusión: Las blogueras cuentan su propia historia.
- Agencias con poca presencia: Los que hemos trabajado en los medios en Estados Unidos, sabemos que una de las fuentes principales de imágenes es Getty. En esta ocasión Getty tuvo una selección demasiado pobre (y cara, pues las fotografías no estaban dentro del paquete básico de suscripción que ofrecen) que pudo haber limitado a muchos medios digitales a la hora de publicar información. Conclusión: Para las agencias ya no es negocio cubrir exhaustivamente ciertos eventos especializados.
- Cobertura recayó básicamente en los organizadores del evento: Si bien, yo no había cubierto anteriormente este evento, y mis experiencias de cobertura de moda han sido principalmente en la New York Fashion Week (ve mi última cobertura aquí), sí pude notar la falta de inmediatez para obtener la información por parte de la organización del evento. Quizás sea injusto compararla con la de Mercedes Benz, y más aún con la Semana de la Moda de Nueva York, pero al final del día en ellos cayó principalmente la responsabilidad de proveer la enorme cantidad de material que se generó de un evento como éste. Más que criticar, pues creo que hicieron un buen trabajo dentro de sus posibilidades, es destacar la coyuntura que se vive en estos momentos, en el que está quedando un vacío a la hora de cubrir eventos de esta envergadura. Conclusión: Fue demasiada información para que una organización que no se dedica a producir contenido noticioso cubriera todos los ángulos al 100%.
- Las redes sociales, importantes pero no suficientes: Sí, los principales reporteros de este evento fueron los asistentes que con el hashtag #MIAFW14 pudieron subir tanto a su cuenta de Twitter como Instagram lo interesante que ocurría en el lugar. Sin embargo, para marcas que invirtieron una tremenda cantidad de dinero en traer desde diferentes partes del mundo todo un show, la mayoría estando a la altura de cualquiera de las pasarelas que me ha tocado ver en Nueva York, las fotos subidas con un teléfono celular son importantes pues generan el buzz que todo mundo quiere lograr, pero no son suficientes. Tras tanta inversión en producción, iluminación, sonido, modelos y demás esfuerzos, merecían tener publicadas fotografías y videos profesionales de altísima calidad sobre el concepto que quieren vender desde Miami. Conclusión: Las redes sociales tienen mucho alcance, pero no sustituyen un trabajo profesional.
- Se quedaron en el tintero muchas historias qué contar: Al haber presenciado la excelentes clases maestras a cargo de la Esden Business School, como la de Modesto Lomba, María León o Rosa Tous, entre muchos otros; charlar y ver de cerca las colecciones que diseñadores como Ágatha Ruiz de la Prada, Maliparmi, Stella Jean, Magnolia, Teresa Rosati, Mariana Castro o Mirage Couture, me quedó clarísimo que a la gente que realmente se toma en serio el tema de la moda y el negocio alrededor de esta industria se le quedó debiendo una gran cantidad de información. Conclusión: Las marcas en sí no obtuvieron una cobertura en medios digitales proporcional a los recursos invertidos y a la calidad de los productos que presentaron.
Ahora queda una gran interrogante: ¿Quién va a llenar el gran vacío de información que queda al ir en decadencia los medios tradicionales? Sí, será en la mismas marcas en quienes recaiga la responsabilidad de contar sus propias historias.
Y tendrán que hacerlo de una manera profesional y acorde a lo que exigen las nuevas necesidades de información si es que quieren seguir compitiendo en esta intensa y apresurada era digital.
(Si te interesa, puedes ver lo más relevante de mi experiencia cubriendo este evento en mi blog Mami Glammy, o en la cobertura que se hizo para Yahoo! De Moda).
Excelente análisis, que ilustra de forma clra y concisa la realidad de la labor informativa en la vertiginosa era digital.
¡Gracias, Vero! Con todos estos cambios se abren muchísimas y emocionantes oportunidades para quienes producimos contenido digital.